Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus hijos
Febrero 13, 2010
 

“Mis pequeños, el Corazón de vuestra Madre está regocijado. Hoy se celebra en vuestros corazones en toda la humanidad la resurrección y la venida del Espíritu Santo a través del Tabernáculo de Amor que fue vuestra Madre Amantísima mientras caminó en el mundo con todos vosotros los hombres, cobijando en Su Vientre con el amor más infinito para cada uno de Sus hijos. Ella entregó en un ágape de amor a la Pequeña Criatura que se convertiría en aquella Sagrada Eucaristía que hoy os da en todos los santuarios y en todos los templos del mundo. Templos, como les llamaba el Pequeño Jesús, en donde se adoraba al Padre Celestial hasta que el Espíritu Santo se cobijó en aquella Criatura que vino al mundo para salvar a la humanidad de la apostasía, de la maldad, del egoísmo y del desamor.

“Vosotros en estos días celebráis la reconciliación y el amor entre todos los hombres. Pero el amor nació con Jesús y cuando Él resucitó, Él les mando el Espíritu Santo a aquellos apóstoles y a vuestra Madre Amantísima en el primer cenáculo de oración que les entrego ahí al Divino Espíritu.

“Vosotros, quizás no entendéis lo que es el Espíritu Divino de Dios y vuestra Madre os viene a explicar que el Padre Celestial se cobijó en aquel Vientre Virginal para hacerse hombre, para convertirse en carne, y después en Verbo. El Padre Celestial era el mismo Espíritu, que se movía en el viento y en las nubes.

“Recordáis vosotros que Dios hizo primero el mar. Ese mar vertiginoso que hoy lleno de ira se sale de sus cauces para arrebatar vidas, para levantar vidas, para limpiar con su agua la maldad de los hombres que se atreven a hacer construcciones [casas al lado de ellas] como vosotros llamáis y cobijáis en ella grandes cantidades de multitudes sin respetar las riveras de los ríos, las riveras de los ríos se deben respetar. En las montañas tampoco pueden fabricarse hogares porque las aguas las pueden arrastrar con ella, no solo la inmundicia sino inocentes criaturas que nada tiene la culpa de lo que el hombre hace en la tierra.

                “Vuestra Madre quiere que todas esas criaturas que se encuentren en este lugar escuchen bien lo que os dice. El Padre fue Espíritu, que se movía como os dije en el aire, en las nubes. Recordad vosotros cuando el Padre se manifestaba a los grandes profetas de la antigüedad, lo hacía a través de revelaciones, de sueños y de grandes cosas que hacía Dios cuando les enviaba el maná del cielo a aquellos que huían por el desierto de Egipto. Otros huían de las tiranías de gobiernos anticristianos. Ellos eran perseguidos y hasta los echaban a los leones y los mataban peores que animales.

“Recordad vosotros que Dios se mueve en cada uno de vuestros corazones registrando lo que tenéis dentro de ellos. Nada se oculta del gran Poder de Dios. Vuestra Madre Amantísima hoy está alegre y la pequeña está alegre, aunque lágrimas brotan de sus ojos. En la pequeña, llora vuestra Madre. Vuestra Madre no tiene que llorar porque donde vuestra Madre se encuentra no hay tristeza. El hombre se regocija en el dolor de todos los demás que sufren cada vez que un tirano gobierna a un pueblo y lo aplasta con sus botas de tiranía y niega la Verdad de Cristo en el corazón de los hombres.  No puede haber bondad en esos corazones llenos de odio que tiranizan a un pueblo, que los torturan, que los secuestran, y los matan.

“El Espíritu Santo se mueve en los corazones de todos los seres humanos buscando la Verdad en ellos. Buscando ver si tienen dentro de sus corazones a Jesús Crucificado, a aquella Eucaristía, aquel pedacito de pan y el vino que cuando el pastor los bendice, los convierte en el Cuerpo y la Sangre de Jesús. Acordaos que eso fue lo que os dejó el Bien Amado para que cada uno os regocijéis y podáis confesar todos vuestros pecados, todas vuestras caídas para que arrepentidos todos podáis consumir el Cuerpo y la Sangre de Jesús. Allí donde Él está en el Santísimo Sacramento del Altar en todos los santuarios del mundo y en todos los templos donde se regocija el Espíritu Divino del Padre Celestial y del Hijo.

“La Madre Amantísima de la Eucaristía se regocija en el mundo, apareciendo por obra y gracia del Espíritu Santo para traer a Sus hijos al verdadero redil, al verdadero camino, al camino que recorrió Jesús con los apóstoles y que un día cuando ese Espíritu se les posó sobre cada una de sus cabezas empezaron a evangelizar a imponer las manos como Jesús les enseñó, ‘Imponed las manos, haced milagros en Mi Nombre y por Mi Nombre,’ y veréis que todo se cumplirá como está escrito que así sea. Todo aquel que ore con amor, que verdaderamente se regocije con el Amado Jesús dentro de sus entrañas recibirá por fe todo lo que pedís. El Espíritu Divino es fuego, fuego que quema los corazones para hacerle sentir que está ahí, pero el hombre no lo escucha.

“El hombre registra todo el firmamento buscando vida y la vida está aquí donde Él la dejó en este mundo que hizo Dios para regocijo de todos los hombres. Hoy, el mundo llora, pequeños Míos. Llora porque está triste por todos los acontecimientos que ocurren en la humanidad que no es castigo de Dios. La tierra, el firmamento, el agua, todo es Dios. El hombre registra todo el firmamento buscando vida y la vida está aquí donde Él la dejó en este mundo que hizo Dios para regocijo de todos los hombres. Está en todo lo que la naturaleza os enseña a vosotros. Todo lo que veis es Obra Divina y la tierra se cobra todo el daño que el hombre hace a la naturaleza que Dios hizo para cada uno de vosotros y para vuestro regocijo.

“Atended la súplica de vuestra Madre Amantísima que hoy viene a todas partes del mundo recogiendo a las criaturas para que encaminen sus vidas hacia el Sagrario, hacia donde está Jesús. Orad, orad siempre por vuestros pastores, los que os dejé para guiar el rebaño que hoy lo dispersan, porque callan la Verdad que está escrita en las Sagradas Escrituras para estos tiempos. Pero Yo le di a la pequeña criatura a través de esas Sagradas Escrituras el Mensaje que vosotros hoy llevareis en cada uno de vuestros corazones para que nunca olviden que el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo son uno Solo y no les va avisar cuando venga.

“Nadie tiene la Verdad. Ni los ángeles del cielo saben el día que Dios manifestará Su Gloria en el mundo y Su Justicia. Nadie lo sabe, no dejéis que vuestros corazones se llenen de mentira que el hombre dice para tergiversar las verdades que están escritas en las Sagradas Escrituras que os dejé a través de todos aquellos apóstoles que caminaron y evangelizaron y sufrieron en sus tiempos. Los santos fueron los primeros que llevaron a todas partes la evangelización para convertir al hombre y atraerlo a la Verdad y al Camino que era como se llamaba en la antigüedad a los que seguían a Cristo. ‘Yo soy la Verdad y el Camino,’ dijo Jesús.  Recordadlo siempre.

“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida,” decía el Bien Amado, pero hoy el hombre tuerce el Camino, lo enreda. Todas las cabezas de los países que hoy están gobernados por el anticristo rodaran. Vuestra Madre Amantísima os lo dijo, Mis pequeños. Todos esos gobiernos que se han enredado en el pulpo del demonio que anda suelto en la humanidad atrayendo a criaturas y engendrando el odio entre los hermanos caerán. Recordad esto, que os digo Dios no castiga, pequeños Míos, manda Su Justicia Divina al hombre.

“Recordad que Moisés fue un hombre convertido que sacó a su pueblo de Egipto, pero antes mató a un asesino que quería matar a uno de su raza, a un judío como él. Dios lo convirtió y lo llevó al camino, a Su Camino, para guiar a Su pueblo hacia la Tierra Prometida. Hoy, el hombre no conquistará su libertad solamente con flores o con manifestaciones muy buenas y gloriosas que vuestra Madre aplaude, pero debe de luchar por esa libertad en una huelga general, como vosotros decís ya que es la única manera que pueden lograr que un tirano caiga. Se cumplirá todo lo que está escrito, pero cuando los hombres dejen caer sus manos a lo largo de sus cuerpos y no hagan nada, todo se cierra, no habrá comunicación con nadie. En una guerra de brazos caídos los tiranos caerán de rodillas y se revolcarán en sus propios lodos.

“Os bendeciré, pequeños Míos, pero la pequeña luego les leerá el Mensaje que está escrito en las Sagradas Escrituras para que sepáis lo que hoy en este Mensaje os trae. Cerrad vuestros ojos. En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen.”

“Escribe en 1ra  a Timoteo, Capítulo 2, Versículos 1-6:  ‘Recomiendo, pues, ante todas cosas que se hagan súplicas, oraciones, rogativas, acción de gracias, por todos los hombres, por los reyes y por todos los constituidos en alto puesto, a fin de que tengamos una vida quieta y tranquila en el ejercicio de toda piedad y honestidad.  Porque ésta es una cosa buena y agradable a los ojos de Dios, salvador nuestro.  El cual quiere que todos los hombres se salven y vengan en conocimiento de la verdad.  Porque  uno es Dios, y uno también el mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, que se dio a sí mismo en rescate por todos y para testimonio de las antiguas promesas dado a su tiempo.  

                Escribe en 2a San Pedro, Capítulo 3, Versículos 1-13: “Esta es ya, carísimos míos, la segunda carta que os escribo, procurando en las dos avivar con mis exhortaciones vuestro ánimo sencillo o sincero; para que tengáis presentes las palabras que os he dicho antes, de los santos profetas, y los preceptos que el Señor y Salvador nuestro os ha dado por medio de nosotros, que somos sus apóstoles.  Estando ciertos antes todas cosas, de que vendrán en los últimos tiempos impostores artificiosos, arrastrados de sus propias pasiones.  Diciendo: ¿Dónde esta la promesa o el segundo advenimiento de éste? Porque desde la muerte de nuestros padres o patriarcas, todas las cosas permanecen del modo mismo que al principio fueron creadas.  Y es que no saben, porque quieren ignorarlo, que al principio fue creado el cielo por la palabra de Dios  asimismo la tierra, la cual apareció salida del agua, y subsiste en medio de ella, y que por tales cosas el mundo de entonces pareció anegado en las aguas del diluvio.  Así los cielos que ahora existen, y la tierra, se guardan por la mima palabra, para ser abrasados por el fuego, en el día del juicio y del exterminio de los hombres malvados e impíos.  Pero vosotros, queridos míos, no debéis ignorar una cosa, y es que un día respecto de Dios es como mil anos, y mil anos como un día. No retarda, pues, el Señor su promesa, como algunos juzgan, sino que espera con mucha paciencia por amor de vosotros el venir como juez, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos se conviertan a penitencia.  Por lo demás, el día del Señor vendrá como ladrón, y entonces los cielos con espantoso estruendo pasarán de una parte a otra, los elementos con el ardor del fuego se disolverán, y la tierra, y las obras que hay en ella serán abrasadas.  Pues ya que todas estas cosas han de ser deshechas, ¿cuales debéis ser vosotros en la santidad de vuestra vida y piedad de costumbres, aguardando con ansia y corriendo a esperar la venida del día del Señor, día en que los cielos encendidos se disolverán, y se derretirán los elementos con el ardor del fuego?  Bien que esperamos, conforme a sus promesas, nuevos cielos y nueva tierra, donde habitará eternamente la justicia.

 

Noche de vigilia
Febrero 7, 2010

 

“Hoy Vuestra Madre está con vosotros pequeños míos, desde que llegó la noche, hablando el Espíritu Divino dentro de su corazón con el fuego que la quemaba y no puede respirar pero ella sigue testaruda.  Hoy Vuestra Madre está feliz, pues se encuentran criaturas que no se acercaban en una noche como esta, a este pequeño lugar. 

Vuestra Madre tiene muchas cosas que decir a los pequeños Recordad cuantas cosas Vuestra Madre os ha dicho en su ir y venir, cuantas cosas os  he dicho que en estos tiempos, en ese mundo que el  Padre Celestial hizo para todos los hombres, pero cuanto daño los hombres le hacen a la humanidad  rebelde, apostata que verdaderamente ni cree en las apariciones.

Muchas, muchas armas de destrucción masiva, el hombre ha fabricado en sus pequeños aparatos con los que pueden matar a miles de seres humanos en esa tierra convulsa donde vosotros vivís.  Dios hizo venir a su hijo amado al mundo a traer la verdad, la verdad al hombre de hoy que al igual que cuando Jesús murió en la Cruz, no creían que era el enviado de Dios para salvar al hombre.  No lo creyeron y lo azotaron, lo maltrataron lo  humillaron, lo escupieron  y lo crucificaron,  Lo hacían arrastrarse con una Cruz vil, pero a la Dios se aferró a ella para llevaros el mensaje de amor, el mensaje de perdón, de caridad para todos los hombres.  Tenéis que gravar en vuestros corazones una realidad verdadera, vuestro Padre no castiga al hombre, Él manda la justicia  para la humanidad, os da la oportunidad de orar y de arrepentiros, pero el hombre no se acerca a Dios.

Vuestra Madre Amantísima os aparece en todas partes del universo, tiene que salvar al rebaño y volverlo a traer al camino, aquel camino que Dios hizo para el hijo, y con el Espíritu Santo hacerlos predicar el Evangelio verdadero. “Amaos como yo os amé” dice el Bien Amado, ¿hoy quien ama como amó Jesús? Nadie quiere, todos quieren  subir no importa quien caiga, el malvado caminará por encima de aquel que caiga. 

El hombre quiere convertir al mundo en un cementerio total con esas armas que fabrica para destruir a la humanidad, no es Dios quien las fabrica, no es Dios quien manda el castigo pequeños míos, son los propios hombres que destruyen la poca capacidad que tiene el ser humano para amar como Él os amó, ni siquiera los pastores que dejó para guiar al rebaño lo conducen por el camino que el Bien Amado os dejo, lo dispersan, y en lugar de hablarle la verdad, de decirles a todos Dios es un Dios que a cada uno os pedirá cuentas en el último día de vuestras vidas y que por la maldad conque vosotros camináis en el mundo esa misma maldad se devolverá contra vosotros  y  vuestros hijos en todas las generaciones como dicen las Sagradas Escrituras.  Os cobraré en lo que más vosotros amáis con el mal que siembran en el mundo con los verdaderos hijos de Dios, aquellos que predican la verdad los apartan los tratan de lejos como si tuvieran lepra.

Recordad siempre a San Francisco de Asís, no tuvo miedo aun teniéndolo todo como lo tenía, no tenía miedo de predicar el evangelio que le daba Jesús con el Espíritu Divino que lo consumía para  hacer el bien para caminar entre los pobres.  San Francisco se sacaba el bocado de la boca para darlo a los leprosos que vivían apartados de la sociedad. 

Os voy a dejar en este momento. Os amo y os bendigo, mi hijo amado mi bien amado padre Pio vendrá en este momento con Vuestra Madre, os impondrá a cada uno de vosotros a través de la pequeña para que aquel que tiene fe, crea y reciba lo que Jesús tiene preservado para cada uno de sus hijos, recordad esto que os digo: Los tiranos se revolcarán, se revolcarán, los tiranos caerán, no hay para ellos perdón por todos los crímenes que cometen con sus pueblos, cada uno recibirá lo que Dios tiene reservado para los que hacen el mal los que se burlan de la miseria del hombre, del infeliz, aquellos que llenan sus valijas con lo que tienen que ayudar y compartir con cada  pueblo, los tiranos se están revolcando ya en sus propio estiércol.  Amen  Os amo y os bendigo.

Febrero 22, 2010
 

Mi pequeña en la Segunda carta de San Pedro Capítulo 3 Versículo 3 os digo: “Tengan esto en cuenta, que en los últimos tiempos vendrá gente que vivirá de acuerdo con sus propios malos deseos y  que son de burla ¿preguntaran que pasó con la promesa de Cristo que iba a volver? Ya murieron nuestros padres y todo sigue igual desde que el mundo fue creado.  Esa gente pequeña no quería darse cuenta que el cielo ya existía desde tiempos antiguos y que por mandato de Dios la tierra surgió del agua también por medio del diluvio fue destruido el mundo de entonces.  Si pasas pequeña al Génesis Capitulo 11-12:  “Era el día 17 del mes segundo, Noé tenía 600 años, en ese día se abrieron las compuertas del cielo arriba, 40 días y 40 noches estuvo lloviendo sobre la tierra.  Si abres en Segunda  de Pedro Capítulo 3 Versículo 7-10: allí os digo que los cielos y la tierra que ahora existen, están reservados para el fuego por el mismo mandamiento de Dios.  Ese fuego los quemará en el mismo día del juicio y la perdición de los malos.  Además, pequeña no olvides que para el Señor, un día es como mil años, y mil años como un día.  No es que el Señor olvide sus promesas, como algunos suponen, sino que tiene paciencia con ustedes; pues no quiere que ustedes mueran sino que vuelvan a Dios.  Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche, entonces los cielos se desharán con ruido espantoso, los elementos serán destruidos por el fuego, y la tierra con todo lo que hay en ella quedará sometida al juicio de Dios.  Si pasa al versículo 12-13: del mismo capitulo, ahí os digo: “Esperen la llegada del día de Dios y hagan lo posible por no apresurarla, porque ese día los cielos serán destruidos por el fuego y los elementos se derretirán entre las llamas.  Pero  nosotros esperaremos el cielo nuevo y la tierra nueva que Dios ha prometido,  en los cuales todo será justo y nuevo.

En Isaías  Capitulo 65 Versículo 17: “Miren, yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva, lo pasado quedará en el olvido, y nadie se acordará de ella.  Os amo

Nota: Pequeña lo que Dios ha prometido para el hombre justo Él lo cumplirá porque está escrito.  Enderezad vosotros el camino del Señor, porque los tiempos finales se acercan y el Señor es justo, y el malo no verá el reino de los Cielos.  Amen

 

Febrero 25, 2010
 

Pequeña escribe en 1ra de Pedro Capítulo 4 Versículo 12-14: “Pequeños míos, cuando Dios os prueba con el fuego de las tribulaciones, no lo extrañéis como si os aconteciese una cosa muy extraordinaria.  Alégrense de tener parte en los sufrimientos de Cristo, para que también se llenen de alegría cuando su gloria se manifieste.  Dichosos vosotros si alguien os insulta por causa de Jesucristo, seréis bienaventurados, porque la honra la gloria y la virtud de Dios, y su Espíritu mismo reposa sobre vosotros.  Pasa a la carta de San Pablo a los Romanos Capitulo 8 Versículo 17: Y puesto que somos sus hijos también tendremos parte en la herencia que Dios nos ha prometido.

Jesús os dice “Cuiden de las ovejas de Dios que han sido puestas a vuestro cargo; hacedlo de buena voluntad como Dios quiere y no por obligación, ni por ambición de dinero.  Amen

Nota: “Pequeña lo que siempre os digo, no pidáis que lo que recibas sea caridad, no obligada.  Vuestro Padre Celestial siempre os proveerá.  Tu corazón no te pertenece, es del Señor, sigue el camino que Vuestro Padre Celestial escogió para ti desde el vientre de tu madre.  Os amo y os bendigo.  Soy Vuestro Padre Celestial tú Divina Misericordia.  Amen

                Os recuerdo que la naturaleza seguirá estremeciéndose en todas partes.  El maligno está suelto (cuidado!) Amen [Febrero 27, 2010, un terremoto de 8.8 azotó la costa de Chile, muriendo mas de 800 personas, dejando muchos desaparecidos y miles de damnificados.  En Marzo 4, 2010 un terremoto de 6.4 azotó  las costas de Taiwán causando deslaves, sacudiendo edificios en Taipei la capital.]

 

Febrero 28, 2010
 

            Escuchad pequeñas criaturas que caminan con el Señor: No profanen más el cuerpo de Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.

            Si tomáis la Sagrada Eucaristía incorrectamente, para vuestra propia condenación y la de vuestros hijos, la tomáis.  Ante mi toda rodilla debe doblarse y toda cerviz debe bajar, porque Yo soy el Alfa y el Omega, el principio y el fin.  Cada vez que ponéis las manos  para recibir la Santa Eucaristía, cometéis pecado y hacéis pecar al sacerdote.    Os amo y os bendigo . Amen


 

Fecha:         1 de Febrero 2010
Nombre:     Miguel Ameigeiras
Ciudad:
      Pembroke Pines, FL

Descripción de una Revelación Espiritual

En el año 2007 Taurin, mi pequeño hijo de 14 meses de edad fue diagnosticado con un tumor inoperable, asociado con hydrocephalitis. El diagnostico inicial no era bueno. Después de cinco cirugías y 40 días en la unidad de cuidado intensivos, se empezó un tratamiento de quimioterapia que duraría 18 meses.  Los doctores querían reducir el crecimiento del tumor con la esperanza de ganar tiempo para poder proceder con un tratamiento de radiología

En el año 2008, fui a un dentista para mi chequeo de rutina y comentando la situación con el Dr, García, el me comentó acerca de Rosa López y de cómo había sido sanado después de haberla visitado.  Yo soy Católico y en ese tiempo me podía considerar un católico tibio.  Soy un teniente Coronel en la Fuerza Militar de los Estados Unidos y les digo esto únicamente para establecer un motivo de credibilidad en la mente de los lectores.

Estaba desesperado por ayudar a mi pequeño hijo en todas las formas posibles y pensé que nada tenia que perder. Un día llevé a mi hijo a ver a Rosa a su casa de Hollywood Fl.  Le narré el caso, entonces ella me dijo que me podía ayudar.  Me explicó que el  don de sanación no venia de ella sino de Dios Padre, Jesucristo y la intervención de La Virgen María.  Ella  puso unos aceites en sus manos y me ordenó que  recostara mi hijo en mi regazo.  Entonces colocó sus manos en la cabeza de mi hijo y empezó a orar.  Me ordenó que  hiciera lo mismo, mi hijo permaneció completamente quieto y en silencio.  Esto continúo cerca de cinco minutos y luego me comunicó que había recibido la sensación que mi hijo había sido sanado.  Me dijo que le gustaría ver a mi hijo por lo menos otras dos veces.

En el transcurso de los próximos meses, lleve a mi hijo a verla otras dos veces.  También lleve a mi hijo a  otras ceremonias de unción de los enfermos a  la Iglesia Católica de St. Edwards en Pembroke Pines, Florida y el Padre Mike Elvers  personalmente efectuó dos veces esta unción en su oficina.

No les puedo asegurar en que momento sucedió, pero yo creo que Taurin fue sanado y creo que  en su multifacética recuperación y no descarto los aspectos médicos de este tratamiento y su recuperación.  Como lo he dicho la Divina  intervención ha sido la llave de su sanación.  Les adjunto radiografías del tumor antes y después como evidencia de este milagro.  Si alguno de vosotros esta enfermo o si algún miembro de  su familia, yo les sugiero que le pidan a Dios que sean sanados, regresen a la verdadera fe, y  les puedo decir que ésta  fe los guiará a que encuentren a Rosa.