Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus Hijos

 Noviembre 13, 2011

“Mis queridas criaturas, Bendito sea el Padre Celestial que da la oportunidad a vuestra Madre de aparecer a cada uno de vuestros corazones aunque vosotros no lo creáis.  Vuestra Madre Amantísima está en cada uno de vosotros, gime dentro de vuestros corazones aunque vosotros no la escucháis.  Jesús habla a muchas criaturas para que lleven el Mensaje de Amor de vuestra Madre a cada uno de vuestros corazones y os enseñe verdaderamente lo que significa el Rosario de vuestra Madre.  Cada Misterio es la Vida del Bien Amado.  Vosotros, cuando oráis el Rosario, estáis caminando cada Misterio la Vida del Bien Amado, desde que Nació, hasta que Murió por cada uno de vosotros en la Cruz, por todos vuestros pecados y aberraciones

Jesús hace que vuestra Madre  venga porque el hombre de hoy niega, niega la Virginidad de María.  Niega que María, vuestra Madre, a través de las pequeñas criaturas [visionarios], aunque vosotros no lo creáis, pueda interceder ante el Bien Amado para que Él haga los milagros.  Vuestra Madre fue el primer Santuario que hizo Dios en la tierra.  En ese Vientre Virginal de vuestra Madre, donde Dios Verbo se hizo Carne para que cada uno de vosotros pudierais regocijaros al decir Amo a la Señora Bonita, como llama la pequeña [Rosa] a vuestra Madre.  Es a través de vuestra Madre que recibís grandes milagros, no solo en vuestras vidas, sino en vuestros hogares, si tenéis una imagen de María que vosotros veneráis. 

María es una sola, pero tiene muchas advocaciones, y por eso aparece vestida diferente en cada lugar que aparece.  María no necesita que vosotros pronuncies lo que necesitáis, ya que el milagro ocurre en cada corazón de ser humano al solo pedídselo internamente a Ella.  María no hace milagros sola, los hace Jesús a través de vuestra Madre.

A la súplica de una madre, nunca un hijo se puede negar, y cuando un hijo le suplica una madre, a esa madre no le puede decir ‘No.’  María siempre está dispuesta a decir ‘Sí’ a la petición de Sus hijos.  Entonces, pequeños Míos, Jesús no puede negarle un ruego a María.  María le sostiene las Manos a Jesús para que no deje caer Su Justicia Divina en esta convulsionada tierra en que vosotros vivís.  María no se cansa de sostenerle las Manos a Jesús, pero Jesús siempre accede a la súplica de vuestra Madre Amantísima.

Vosotros veis que vuestra Madre se aparece en todas partes del mundo para que no tengáis necesidad de correr distancias grandes para encontraros con María.  No tenéis que hacerlo, pequeños Míos, porque María, como Jesús, está en cada uno de vuestros corazones cuando verdaderamente vosotros creéis.  Jesús envía a María a buscar a Sus hijos en cada aparición.  ¿Porque el hombre no cree que María hace milagros?  ¿Y en la boda de Cana, a través de quien se pidió el primero milagro?  Dios y Jesús son un solo Camino, pequeños Míos.  Hay un solo Camino, Jesús de Nazaret, el Divino Maestro, el Cordero de Dios, que quita los pecados del mundo.

María fue a Laria, una pequeña cuidad anexa al santuario donde fue a presentar al Niño.  Por eso están las apariciones de María como la ‘Can-de-laria,’ porque fue a Laria, con la Luz del Mundo, que es Jesús, y Ella fue al templo a presentarlo como Su Primogénito.  En los templos son donde están los pastores que el Bien Amado os dejó para consagrar a unas criaturas cuando están presentada allí.  Es allí en esos templos que os dejó Dios, donde hoy se sacrifica el Cuerpo y la Sangre de Jesús, donde el hombre tiene que acudir con frecuencia y arrodillados frente a Él pedirle perdón por los pecados cometidos por cada uno de vosotros, por la falta de amor, por la falta de fe, por la falta de creer sin ver.

No sabéis que Jesús no necesita que vosotros lo veáis.  La fe es la que hace que cada uno de vosotros os acerquéis a Jesús y a vuestra Madre.  No necesitáis ver como Santo Tomas para creer.  Si vosotros necesitáis ver para creer, de nada os servirá.  Dios no da pruebas; da Señales para que cada uno de vosotros a través de vuestra fe podáis sentir la Presencia de Jesús y de vuestra Madre en vuestros corazones y Ellos no os negarán nada.  Si vosotros con humilláis corazones pedirles una revelación, pudráis ser conducidos al Verdadero Camino, que es Dios.

Dicen los hombres que la fe mueve montañas.  Es verdad, mueve montañas, pero la fe verdadera, no la fe inventada por el hombre y que se la atribuyen al sacrificio de animales, a leer las manos, a leer las cartas, a creer en espíritus que vienen a quitaros cualquier enfermedad que vosotros tengáis, y acuden a esos lugares en vez de creer en el Sacrificio de Jesús que es el Cordero de Dios, que se sacrificó para que vosotros fuerais salvos.  Pero no, vosotros creéis en esa fe que inventa el hombre con cartomancia, con adivinos, con brujos que sacrifican infelices animales que os sirven como alimento y vosotros los sacrificáis en ofrecimientos a esos santos que se han inventado ellos mismos.  Los verdaderos santos están en la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, y que hoy muchos han sido retirados de las iglesias por culpa del hombre, porque los usan para toda clase de fetichismo y de creencias que para Dios no existen.  Dios Sacrificó a Su Hijo, que es el Cordero de Dios.  Lo Sacrificó para salvar al hombre de aquellos grandes sacrificios de doncellas y animales que hacían en la antigüedad, pero que hoy de nuevo los estáis haciendo.

Vuestra Madre os va a decir algo muy importante.  Os quiere decir que se acercan momentos difíciles.  Orad para que los palestinos no ataquen a Israel.  El día que ataquen a Israel, allí donde empezó todo, terminará todo.  Muchas profecías se van cumplir para aquellos que viven en esos países gobernados por anticristianos que se roban las riquezas de esos países vuestros, para hacer fetichismo como en África, en los países nórdicos y en los países latinoamericanos.

Os diré una revelación que la pequeña recibió hace mucho, para aquellos que viven en ese país [Venezuela] muy lindo, donde hay petróleo que Dios dejó para que el hombre pudiera usarlo en cosas buenas y enriquecer a eso país.  Vosotros conocéis a ese tirano que profanó una tumba de un patriota que si murió por liberar a su pueblo [Simón Bolívar] y no era anticristiano.  Es ese hombre que gobierna ahora a ese país, donde el petróleo y el oro son la riqueza y la economía y se los ha quitado a su pueblo, igual que le paso al pequeño país de la pequeña criatura [Cuba].  Hace tiempo que vuestra Madre os dijo que Castro estaba muerto, y está muerto.  No lo pueden decir porque el día que lo digan se hunde ese pequeño país.

Hoy os revelo que Chávez no vivirá para contarlo.  ¿Sabéis porque?  Profanó una tumba del héroe de ese país [Simón Bolívar].  La profanó con dos personas más.  Se acostó en la tumba y aspiró lo que aquel esqueleto, aquellos huesos emanaban, pero no sabía que ese héroe dejó escrito una maldición para aquel que la profanara.  Y dice así, ‘Aquel que profánese mi tumba maldito será.’  Fueron tres los que profanaron esa tumba, ya partieron dos; solo falta Chávez.  Está condenado a morir por sus propios hechos.

El día que el pequeño país de la pequeña criatura [Cuba] se dé la noticia de que Castro está muerto, será el fin de todos esos malhechores que no lo dicen para no revolcarse en su propio lodo, en su propia sangre.  Vuestra Madre os dijo un día, cuando caiga uno de los tiranos más sanguinarios que hay en el mundo, los otros caerán como en un juego de ajedrez.  Pero también Jesús os dice, ‘Aquel que no quiera luchar por la libertad de sus países que están siendo gobernados por el anticristo, entonces no merece ser libre.’  Pero si el hombre no quiere derramar su sangre como la derramaron los grandes profetas en la antigüedad y los grandes gobernantes de esos tiempos, con dejar caer sus manos hacia abajo y cerrar todos los comercios donde se brinden alimentos y petróleo y haya huelga de brazos caídos, el tirano no dura tres días.

A cada uno de vosotros que estáis en este pequeño lugar, os dice vuestra Madre que os aparezco en todas partes llamando a Mis hijos a que vuelvan al Camino de Jesús, que es uno Solo que se llamaba el Camino, la Iglesia Católica de hoy.  No debéis juzgar a los sacerdotes que son como vosotros; debéis orad por ellos.  Orad por las vocaciones de monjas, de religiosas.  Orad por vuestros hijos, pequeños Míos, que cuando salen de vuestros hogares en vez de vosotros decir, ‘Señor, te los consagro en este día para que regresen bien al hogar.’  Los dejas sin consagrarlos sin saber si van a regresar o no. 

Los hogares están destruidos por ese pequeño aparatito que hace que el hombre ya no necesite a su esposa y que la mujer no necesite a su esposo.  Un día, vuestra Madre hace tiempo os dijo que ese pequeño aparatito que se inventó para ayudar a los jóvenes a estudiar y para llevar sabiduría, se convertiría en la causa de muchos hogares destruidos.

Recordad esto:  Los gobernantes Rusos dijeron un día que ellos no destruirían a los Estados Unidos con guerra ni con armas de ninguna clase, sino con la droga que envenenarían a todos los jóvenes en sus escuelas, en las universidades, con ese pequeño aparatito, donde hacen ‘sexo,’ jóvenes y adultos.

Vosotros debéis saber que el mundo no se va a hundir de nuevo en el agua como cuando Noé.  No, está preservada para el fuego como Sodoma y Gomorra, porque hoy este mundo se ha convertido en Sodoma y Gomorra. 

Recuerden, registrad las Sagradas Escrituras.  Las bendicen en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y abridla que ahí os Hablará Dios, porque todos no sois teólogos, expertos en la materias de las Sagradas Escrituras que son muy antiguas.

Recordad a los que escriben los Mensajes que vuestra Madre os da, sabéis que ni una tilde se podrá cambiarse de lo que está escrito siempre en este lugar, porque para su propia condenación la cambiaran. 

Os amo, pequeños Míos, os amo.  No busquéis a María en todas partes, buscadla donde está más cerca, donde a vosotros se os pueda aparecer.  No la busquéis lejos, porque todos los lugares de apariciones serán santuarios para en un momento determinado, sean refugios de los grandes acontecimientos que se acercan para la humanidad. 

Os amo y os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  Amen.

Para aquellos que predican el fin del mundo, nadie tiene esa verdad, porque Dios no avisará cuando va a mandar Su Justicia a la tierra. 

Abrid las Sagradas Escrituras en San Marcos, Capítulo 13, Versículos 6-8: ‘Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y engañaran a muchos. Más cuando oyereis de guerras y de rumores de guerras no os turbéis, porque conviene hacerse así; más aun no será el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá terremotos en muchos lugares, y habrá hambre y alborotos; principios de dolores serán estos.’

                Pasa a Versículos 9-10: ‘Mas vosotros mirad por vosotros: porque os entregarán en los concilios, y en sinagogas seréis azotados: y delante de presidentes y de reyes seréis llamados por causa de mí, en testimonio a ellos. Y a todas las gentes conviene que el evangelio sea predicado antes.’  Amen.”

Noviembre 5, 2011

Noche de Vigilia

                "Mis pequeños, cuanto tiempo he tenido que esperar para que la criatura me deje hablar, la pequeña con la impaciencia que tiene por salir de este momento maravilloso que vosotros hoy con pequeñas nuevas criaturas que acuden al encuentro  de Vuestra Madre Amantísima.  No sabéis vosotros que allá en la eternidad no hay tiempo, es tiempo es de vosotros los hombres, apresurados siempre por llegar al final antes de empezar. 

 Os quiero decir pequeños míos que la carrera que vosotros lleváis en este día para escuchar a Vuestra Madre Amantísima,  ha sido larga no solo para Vuestra Madre  sino también para la pequeña impaciente por salir de un forastero que aunque lo conozco, hizo posible que Vuestra Madre  esté en este lugar, mucho antes que lo que pensaba llegar.  Muchas personas nuevas que no habían venido recibirán lo que han venido a buscar. 

Orad pequeños míos, siempre os he dicho que antes que se terminara este año lunar, pasarán grandes cosas para la humanidad, han pasado muchas cosas.  Pero todavía falta, tenéis vosotros que orar para lo que está preparado para la tierra prometida, no suceda, porque cuando toquen esa tierra prometida, la tierra divina del Bien Amado, será el principio del fin para muchos, orad para que Jerusalén no sea atacada por los anticristianos que persiguen a Jesús, todavía después de haber dado su vida para que el hombre se salvara, si os arrepentís de los males que estáis haciendo.  Es el mismo hombre quien siembra las guerras, quien siembra la muerte en todas partes, porque no provoca una guerra, para ganarla, sino para sacar provecho de ella, para que otros mueran.

Dios hizo este mundo pequeños míos para que vosotros os regocijarais, pero vosotros no entendéis que cada vez que hacéis una guerra y no la terminan, mueren muchos inocentes caen  dejando hijos sin padres, madres sin hijos, esposas sin marido. 

Os he dicho, guardad alimentos que no se echen a perder, agua; porque en este momento la vida  de los seres humanos, como os lo digo, está suspendida por la mano poderosa de Dios, que la Madre Amantísima la aguanta, para que no deje caer su ira sobre el hombre por el que Jesús mi amado Jesús muriera en la cruz por cada uno de vosotros.

 No busquéis a Dios en todas partes, Dios está en cada corazón de cada ser humano y ahí, Dios os escucha y Él sabe cuándo las personas vienen a recibir o cuando vienen a investigar, pero en algún   momento Vuestra Madre las confrontará.  Vosotros sabéis que la pequeña esta delicada, cuando dijo si a Jesús, aceptó la cruz.

  Siempre os he dicho pequeños míos que vuestros países han caído en el anticristianismo para hacer un solo poder, como los masones, un solo poder, y ese será el día de la confrontación de todos los pueblos.  No le creáis a ninguna criatura que venga a susurrar a vuestros oídos que el mundo se va a acabar, que ya viene el final de los tiempos, no le creáis, todavía falta, hasta que el hombre no se arrepienta de toda su maldad no se enfrentará  ante la justicia de Dios.

                Orad por Israel, por el mundo, por los infelices que mueren huyéndole al hambre, a la miseria, a las enfermedades, orad en familia, pequeños, en familia la oración es poderosa, se mantienen los hogares unidos.  No toquéis a las puertas de nadie para invitarlos a una reunión con Jesús que nada tiene que ver con Jesús que es uno solo, un solo camino para la salvación de cada uno de vosotros. 

Grandes conflagraciones vienen para la humanidad, pero es el mismo hombre quien escoge a sus gobiernos, por eso el anticristo gobernará por un tiempo en todas partes, pero será el tiempo del fin, no es cuando el hombre crea, sino cuando Dios mande.  Vuestra Madre se aparece en todas partes del mundo, porque el Bien Amado, está escogiendo en cada lugar de aparición, a su rebaño, a su pueblo, por eso es que busca en cada uno de esos lugares, buenos pastores que siembren la semilla de la oración, de la conversión, del amor. 

Yo os aseguro que si cada uno  habla del poder Divino de Dios, no le faltará nada, pero aquel que lo niegue, aquel que no tenga el valor de justificar su fe, en que verdaderamente existe, Él no os va a avisar cuando venga, para que vosotros lo veáis, Él os agarrará por sorpresa a todos. 

Hoy os digo: Grabad en vuestros corazones esto que os diré.  Seguirá la tierra convulsionándose, Dios es la naturaleza, seguirá cobrando vidas, raptando a aquellos para que no vean lo que viene detrás.  Seguirán los países revolcándose en la sangre de sus pueblos, pero yo os aseguro que cada uno caerá como un juego de ajedrez y se hundirá en su propia sangre y en su propio lodo.  No hay tirano que pueda sobrevivir al abuso y la muerte en sus países que están hoy en guerra, pequeños míos.

 Os dije que vendría la resección en este país y en todas partes y está andando.  Orad para que no sea depresión, sino recesión, se está saliendo poco a poco, pero todavía no es el tiempo de que acabe. Todavía el hombre tiene que doblar rodillas, pedir perdón por los crímenes que se cometen y no se juzgan.

 Los jóvenes corruptos que acaban no solo con ellos sino con sus familiares; los niños abortados, secuestrados asesinados y el hombre no hace nada, por esos Dios justo juez seguirá mandando al hombre la justicia divina.  No creáis vosotros que es  por gusto que Vuestra Madre Amantísima aparece en todas partes, está llamando a sus hijos en cada lugar de aparición.  Cada lugar de aparición será un lugar de recogimiento y de refugio, por eso es que os pongo una parición mariana en todas partes, cercana al lugar, para que no tengáis que correr lejos a buscar la salvación, sino que la busquéis donde os la pone Dios. 

No os hablaré mucho, pequeños míos, porque éste que está acá, está apurado y Vuestra Madre está impaciente, no le gusta que vean cosas tan privadas como  lo que ocurre en estos momentos, más bien que se mantengan alejados, que no entorpezcan al Espíritu Divino que quiere estar con cada uno de sus hijos, pero que no puede estar en privado para poderos acurrucar en Mi corazón y poderos dar todo a aquellos que han venido con amor a recibir, pequeños míos.  Os bendigo en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo Amen."